LEONEL FERNANDEZ

No hizo tan airoso papel en Cuba ni en la Universidad de La Habana

Aunque los plumíferos de a tanto por línea que integran el cortejo que le acompaña para desinformar a través de la prensa amarilla, por medio de la tergiversación y manipulación de los hechos, hayan propalado que Leonel Fernández fue toda una sensación en la recién pasada conferencia de presidentes en Cuba, en realidad allí fue uno de los presidentes que se mostraron como partidarios y defensores de la globalización y el neoliberalismo.

Dentro de esta tónica fue que concurrió a la Universidad de La Habana, en cuyo escenario pronunció uno de sus disparatados discursos, en los que siempre se confunde la gimnasia con la magnesia y en los que se dedica a resaltar como bueno y válido todo lo que beneficia al imperialismo y a los explotadores, en tanto se perjudica y se hunde más y más a los pobres.

Leonel Fernández es un alabardero contumaz de todas las falacias y mentiras con que los explotadores justifican su labor de exacción de los trabajadores.

Y resulta que, a un buen tiempo de peroratas, empezaron las preguntas, y Leonel Fernández se percató de que eran preguntas libres y que no estaban previamente arregladas a su favor, por lo que optó, simple y llanamente, por excusarse y retirarse inmediatamente, dejando a los asistentes en el más completo desconcierto, pues esperaban llenos de ansiedad poder tener un coloquio libre de intercambio de ideas y conceptos a la luz de los hechos y prácticas de los últimos 15 años de neoliberalismo y globalización en América Latina.