Un terremoto de homosexualidad estremece a la Iglesia Católica

Los abusos sexuales de niños por los curas

Como prometimos, no vamos a permitir que el cardenal Hildebrando Borgia López Rodríguez prosiga como un auténtico Bin Ladem con su modalidad de terror psicológico de manera impune contra la ciudadanía.

Dijo que los violadores de niños eran practicantes de los ritos satánicos.

Si le tomamos la palabra habría que darnos la razón de que, efectivamente, los cultores del satanismo están en la misma Iglesia Católica y otras sectas cristianas, pues al final de la primera quincena de febrero la agencia internacional de prensa EFE informó que nada menos y nada más 14 nuevos sacerdotes en Manchester, EE.UU., que se suman a otros 80, estaban siendo traducidos a la Justicia por violaciones a menores. Entre los acusados hay obispos, como un tal John McCormack y se señala al cardenal Bernard Law como propiciador de esas aberraciones, pues parece opinar que hay que permitir que sus cuervos ensotanados se diviertan abusando de niños.

Es digno poner de relieve que el cura John Geoghan está acusado de abusar sexualmente de unos 150 niños y ahora colgó los hábitos. Parece que se arrepintió y dijo: mientras tenga esta sotana y difunda tanta superchería seguiré en lo mío.

Otra cosa: Fue en la iglesia de Cotuí y no en otro sitio donde se encontraron dos calaveras y una cabeza con fines rituales.

¿En qué estamos, Hildebrando Borgia Nicolás de Jesús López Rodríguez?

Atrévase a denunciar a los pedófilos y homosexuales de su diócesis nacional.