Rafael Hipólito Mejía propicia haitianización total República Dominicana

 

Cuando Rafael Hipólito Mejía visitó por última vez la ciudad de Santiago, el Director del Hospital José María Cabral y Báez quiso entrevistarse con él para comunicarle que era en realidad escandaloso el hecho de que en ese Hospital público más del 70% de los niños nacidos allí eran de parturientas que venían directamente de Haití a parir aquí, en la República Dominicana para que le fuera entregada un acta oficial, con la cual sacar luego el acta de nacimiento como dominicanos.

El pueblo de este país debe conocer que en prueba de que, como dice el refrán, la iglesia está en manos de Lutero, el flamante Presidente del Poder Ejecutivo le espetó: "No jodas con eso, deja que siga sucediendo que esas son órdenes que me han dado desde el exterior".

Esto que está sucediendo pasa ya de morado a negro, puesto que no se concibe que un Presidente, fruto de la voluntad de la mayoría del electorado dominicano que votó el 16 de mayo del 2000, no tenga ni un ápice del concepto de lo que es la soberanía nacional y mucho menos lo que es la soberanía de un pueblo.

Ya está bueno. Que se detenga este proceso de destrucción de la República Dominicana por parte de sus propios gobernantes.

Si los dominicanos vieron por televisión el espectáculo de la inauguración de la Zona Franca fronteriza, pudieron comprobar que una enorme cantidad de haitianos, de los concurrentes desde el mismo Haití, lo hicieron con franelas que tenían un dibujo en el pecho de ese haitiano infiltrado como un huevo de serpiente entre los dominicanos llamado José Francisco Peña Gómez.

Con hechos evidentes e irrefutables como éste queda comprobado que todo lo que hace el gobierno de Rafael Hipólito Mejía y el PRD es dando cumplimiento al testamento antidominicano de ese architraidor a la República Dominicana que fue José Francisco Peña Gómez.

La llamada Zona Franca integracionista de la frontera no es verdad que traerá ni favorecerá el entendimiento ni el acercamiento entre los dominicanos y los haitianos.

Esa Zona Franca sólo facilitará la agudización de las diferencias, así como aumentará la presión y las exageradas acusaciones contra la República Dominicana por parte de los haitianos y los países imperialistas que buscan imponer la fusión de República Dominicana con Haití, así como por parte de un sinnúmero de organizaciones mercenarias, como el Fui de Narciso Isa Conde o la gente del Miuca-pct.