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Aunque duela debemos reconocer La UASD
es un gran desastre
Cada
día que pasa se pone más en claro el real papel del rufián llamado
Roberto Santana en su paso por la rectoría de la UASD, quien actualmente
es funcionario gubernamental, así como relacionador público de las
distribuidoras de electricidad e inversionista con 13 millones en éstas. No
sólo que cualquerizó, vulgarizó y rebajó el nivel de laUASD a su más
insignificante expresión, sino que la desfalcó junto al actual
Procurador General del gobierno de Rafael Hipólito Mejía, que era su
Consultor Jurídico, Juan TH, Colombo y demás. Sí, estamos hablando de
los actuales canchanchanes periodísticos de Rafael Hipólito Mejía. Todos
los egresados que efectuaron su maestría y se graduaron de ésta en el
1995 tienen ahora que volver a hacerla, ya que esa graduación no se
registró ni se depositaron los fondos en las cuentas de la UASD, aunque
los profesionales pagaron por ese derecho RD$500.00. Y por otra parte,
resulta que de 500 profesionales revisados en lo que se denomina una
auditoría profesoral, aparecen múltiples casos en los que los profesores
han abandonado la docencia y quien la imparte es un monitor o un amigo del
supuesto profesor, que muchas veces se encuentra fuera del país en otras
labores que nada tienen que ver con la UASD o están desempeñando otras
labores en el país, aunque cobran y comparten el monto del salario con el
“sustituto” de ocasión. La
denominada auditoría profesoral se lleva a cabo sobre los 2,500
profesores que nominalmente tiene la UASD para saber por qué vía se
engancharon en ese centro de estudios, que debería ser el de más alto
nivel en el país; cuál es su real nivel profesional y de dominio de la
materia que imparten, así como si han pasado determinados exámenes o han
hecho cursos especializados. Lo cierto es que la UASD, aunque duela,
debemos reconocer que es un gran desastre.
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