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		Revisionistas de 
		nacimiento y son traidores y otros que se hicieron que son los renegados Al día de hoy, en que la abjuración y los abjuracionistas ya han mostrado todo su real contenido de traición y de haber desempeñado hasta sus últimas consecuencias lo de ser protagonistas y sustentadores del papel de lugartenientes de la reacción, de los capitalistas y del imperialismo infiltrados en el seno del movimiento socialista y revolucionario y habiendo causado deliberadamente todo el daño que son capaces de efectuar los Caballos de Troya, se da el caso de que, si bien hay revisionistas y oportunistas a los que, justamente, como acontece con la pandilla de los jruschovistas de la ex-URSS de los Maurice Thorez de Francia, Palmiro Togliatti de Italia, Carrillo de España, Berlinguer de Italia, Marchais de Francia y las recuas de su mismo pelaje de América Latina y Norteamérica como Browder y compañía, a los que justamente les encaja el concepto de revisionistas y oportunistas renegados del marxismo-leninismo y del socialismo, pero también los hay, como acontece con los que constituyeron el partido “capitulacionista” dominicano (p“c”d), hoy disuelto tras su desenmascaramiento y derrota ideológica y política así como teórica, que no alcanzan la condición de traidores renegados revisionistas y oportunistas porque nunca, en efecto, renunciaron al marxismo-leninismo y lo sustituyeron en su plataforma y en su ideología por principios de otra ideología, sino que desde sus primeros inicios, estos elementos se adhirieron al revisionismo de los renegados, y que lo que estudiaron y constituyeron en su doctrina guía no fue en momento alguno el marxismo-leninismo del que luego abjurarían, sino que fueron moldeados y forjados en la abjuración revisionista desde sus mismos inicios, por lo que la condición de renegados les viene por herencia, pero no porque en algún momento fueron marxista-leninistas y dejaron de serlo en otro para militar en la traición, sino que nacieron y se forjaron desde sus mismos inicios como revisionistas y traidores. Este no el otro es el caso de los Gordo Cuello, Asdrúbal Domínguez, Franklin Franco, Narciso Isa Conde, Luis Gómez Pérez, Tony Isa Conde, lo mismo que los Carlos Dore Cabral, Rubén Silié, Wilfredo Lozano, Diógenes Céspedes, Orlando Martínez, Andrés L. Mateo y toda esa caterva de contrarrevolucionarios y farsantes oportunistas. 
		Marx y Engels llamaron a esas corrientes, 
		representativas del enemigo infiltrado, oportunismo, lo calificaron de 
		socialismo de cátedra, social-reformismo burgués y pequeño-burgués, etc. 
		Así, enfrentaron a Berstein en principio, a fines de la década del ’60, 
		a Dühring en la década del ’70, y al socialismo de cátedra desde el ’70 
		hasta la muerte de Engels en el 1895. 
		Stalin continuó la obra de Lenin, y desde la muerte 
		de éste, acaecida en el año 1924, en lo fundamental resumió gran parte 
		de las experiencias acumuladas de lucha del socialismo científico o 
		marxismo-leninismo contra el revisionismo. Pero la banda de 
		revisionistas asaltó el Poder del Estado y el Partido de Lenin y Stalin, 
		abjurando de la síntesis revolucionaria socialista que integra el 
		marxismo-leninismo. Esto constituyó un triunfo de los renegados y de los 
		traidores, como evidencia y comprueba el balance de la historia. Esa 
		camarilla de revisionistas y renegados del socialismo propició el 
		triunfo de la restauración del capitalismo y el imperialismo, así como 
		de la explotación del hombre por el hombre en toda la ex-URSS. 
		Los del partido de social pordioseros (PSP), que eran 
		una banda de traidores y exponentes del socialismo oportunista de 
		cátedra, fueron quienes sirvieron de correa directa de transmisión del 
		jruschovismo a la República Dominicana con sus falacias de partido de 
		todo el pueblo, Estado de todo el pueblo, de la transición, coexistencia 
		y emulación pacíficas, que nada tienen que ver con los postulados de 
		principios del marxismo-leninismo, y fomentaron como ideología la 
		colaboración de clases y no la lucha de éstas; la colaboración de los 
		jóvenes con los líderes y partidos burgueses y de agentes del 
		imperialismo como con el PRD y Bosch Gaviño. 
 
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