Miren
lo que ha parido el peñismo o peñagomismo
Si
el ciudadano pone atención y observa, se dará cuenta que el peñismo,
como corriente ideológica y política, es como la ñeca, que nunca coge
cabeza ni tiene forma definida. Así,
causa asombro cómo en el PRD todas las cosas, incluso las más disímiles
y contradictorias entre sí, son justificadas por sus protagonistas a
nombre del peñismo o peñagomismo. Veamos:
Rafael Hipólito Mejía manda al carajo la nacionalidad dominicana, llama
a nacionalizarse, como lo hizo él, norteamericano, y lo sustenta en que
el ejemplo de todo eso es Peña Gómez. Dice
que no se reelige, que él es igual que Peña, antireeleccionista por
principio, pero promueve la reelección, coge los fondos del Estado para
reelección, y todo eso es conforme, según dice, el pensamiento de Peña
Gómez. Hatuey
Decamps, quiere ser candidato en el 2004 por el PRD, por encima y sin que
las bases del PRD decidan eso democráticamente, porque así lo hacía Peña
Gómez. Peguero
Méndez y el Peña Guaba, con Fiquito Vásquez, Dolores González y Darío
Gómez, se vendieron a Leonel Fernández y su gobierno, conforme el
pensamiento de Peña Gómez. Andrés
Bautista pasa la reelección en el Senado porque Peña siempre se reeligió. Los
congresistas del PRD quieren darse 2 años más, por encima del período
que les asigna la Constitución porque así lo indica el pensamiento de Peña
Gómez. Así
podríamos seguir hasta mañana enumerando actos y posturas caracterizados
por el predominio absoluto de la inmoralidad y la falta de escrúpulos,
como el irrespeto al pueblo; y todo eso siempre, admiten sus
protagonistas, está de acuerdo con Peña Gómez. Por
ello es que, justamente, lo definimos como el más lumpen de todos los lúmpenes
del mundo. |