Con escándalo PPGatos

Acusación corrupción gobierno Rafael Hipólito Mejía y su Poder Ejecutivo dejó de ser expediente inventado por la oposición

 

Con el conocimiento por la opinión pública del escándalo de los PPGatos del que no logrará desligarse Rafael Hipólito Mejía por más estratagemas y piruetas que lleve a cabo con esa finalidad, lo de la acusación imperante en el seno del gobierno y de su Poder Ejecutivo mismo dejó de ser un simple rumor o un expediente al que la oposición echará manos con el objetivo de desacreditar la imagen de Rafael Hipólito Mejía y su gobierno, tal y como lo catalogaran en reiteradas ocasiones tanto el mismo Rafael Hipólito Mejía como sus apologistas pagados e indiscutiblemente beneficiados de esas nocivas prácticas administrativas tan dañinas y perjudiciales al país y a la sociedad, sobre todo cuando se efectúan desde o en el entorno directo del órganos principal del Poder Ejecutivo.

Como en otras ocasiones, al momento en que se esperaba un desenlace del caso, Rafael Hipólito Mejía se ausentó en un viaje por 10 días hacia Japón en el Extremo Oriente.

Ya se recuerda que cuando iba a efectuarse la unilateral designación de la Junta Central Electoral, Rafael Hipólito Mejía se ausentó hacia los EE.UU.

Diciendo que no intervendría en la selección de los miembros del tribunal electoral, en realidad no sólo que había participado en su escogencia previa, sino que había impartido hasta los alegatos jurídicos constitucionales llamados a amparar esa insensata decisión criticada con dureza por todos los círculos sociales.

No nos cabe duda de que del Presidente Rafael Hipólito Mejía, salió la opinión de que había que soltar a Pepe Goico, y que fue obedeciendo a esta disposición que Máximo Aristy Caraballo optó por la complaciente calificación de correccional de un hecho que no sólo es de franco carácter criminal, sino que coloca a Pepe Goico como reincidente en fechorías de esta naturaleza como simple cómplice.

El viaje de Rafael Hipólito Mejía al Japón estuvo vinculado, no cabe duda, a echarle agua al vino con fines de desactivar con un golpe maestro el escándalo en que han caído elementos claves, por lo menos en estos momentos, del aparato secreto para la depredación del Estado dominicano, configurado desde los 12 años.

Pero esa misma salida de Rafael Hipólito Mejía, en caso de que se hubiere consumado su funesto deseo, proclive a todas luces al favorecimiento de la corrupción dudamos mucho que no le hubiese reportado un efecto contrario al que Rafael Hipólito Mejía y su equipo del PPGatos esperaba obtener, tal y cual resultó con lo de la arbitraria e insensata selección de la Junta Central Electoral con Morel Cerda a la cabeza.

 

Volver a la Página Principal