Las palabras del servidor del imperialismo, del neoliberalismo y del cartel católico-Vaticano Jorge Subero Isa de que los dominicanos “pueden vanagloriarse de tener justicia libre e independiente” se corresponden con su condición de usurpador aberrado del Poder Judicial

 

En un acto del clan periodístico del Opus Dei-Pepín Corripio de maridaje espurio más que de ventilación libre de las causas y características particulares del calamitoso y desastroso estado del Poder Judicial asaltado y víctima del Golpe de Estado que en el mismo diera el vitalicio Presidente de facto, inconstitucional e ilegal de la Suprema Corte de Justicia, el montaraz agente de los consorcios monopolistas extranjeros y servidor incondicional del imperialismo, del neoliberalismo y del oscurantismo que impone el fatal cartel católico-vaticano sobre el país, Jorge Subero Isa, este mismo siniestro personaje de sainete tiene la insolente desfachatez de proclamar que los dominicanos, sin que sepamos a qué comunidad del mundo actual en realidad se refiere cuando emplea ese patronímico, “pueden vanagloriarse de tener justicia libre e independiente”.

Estas palabras son emitidas por un presumido y fanfarrón mercenario, pues no otra cosa es en verdad el que usurpa el Poder Judicial del país, auto-endilgándose a la vez la condición de vitalicio mediante la aberración de erigirse en juez para sí mismo, lo que contradice en forma absoluta hasta las mismas ideas tanto de derecho como de justicia, y ni qué decir de moral, pues el mayor acto de amoralidad que se puede concebir sólo puede tomarse en el significado de la primera parte de la palabra vanagloriarse, que en gran medida significa autoengaño, estafa hueca, sin sentido ni contenido real de gloria alguna.

Y proviniendo de su autor, que es este montaraz hombre de las cavernas, más bien un gitano o ciudadano roma, un fariseo y farsante que ha tenido la desfachatez y hasta la insolencia de declarar obsoleta la soberanía nacional, así como que nunca ha abierto la boca ni movido su lengua para protestar por la matazón que viene efectuando, por medio de fusilamientos y ejecuciones, en acciones calificadas por la prensa amarilla cómplice, verbigracia, los abyectos canallas que montan el maridaje de “Hoy”-Opus Dei-Corripio con Subero Isa, como acciones extrajudiciales, que se vienen efectuando años van y años vienen, contándolos desde que Subero Isa usurpa la Judicatura con carácter vitalicio, con un ritmo, según las cifras acicaladas y amoldadas a conveniencia del mismo sistema imperante y de sus verdugos beneficiados, un promedio, anualmente, de 500 caídos en intercambios de disparos.

Revisando estos casos monstruosos, surge la idea de que este funesto Presidente de facto de la Suprema Corte de Justicia se puede estar refiriendo, cuando cínicamente habla de que los dominicanos pueden vanagloriarse, que es lo mismo que fanfarronear, de tener justicia libre e independiente, a esos que, junto con él, como es el caso del Cardenal Nicolás de Jesús -Hildebrando Borgia- López Rodríguez, los inútiles e inservibles designados Presidentes, como Rafael Hipólito Mejía y el actual lacayo Leonel Fernández, líder de los pelegatos, han continuado con las viejas prácticas que Balaguer heredara de la dictadura y que ellos copiaron de este tirano alimaña, de fusilar, desaparecer, asesinar, dar muerte y ejecutar a ciudadanos dominicanos por la libre, sin estar sujetos a ley alguna; se trata pues de que esos dominicanos, investidos de la condición de Policía Nacional, para satisfacción de aquellos personajes y de los Radhamés Gómez Pepín (el criminal Jack el Destripador) y del insignificante Juan Bolívar Díaz Santana, ajustician por la libre y en forma independiente a todo el que les venga en ganas o se les haya dado desde arriba la orden para matarlo bajo el capítulo de la mano dura y el intercambio de disparos.

 

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