LOS HECHOS Y ACONTECIMIENTOS HAN HABLADO Y ASI DEMOLIDO LAS VENENOSAS ACUSACIONES DEL HOMBRE BABOSA SIRVIENTE INCONDICIONAL DE LO PEOR FEDERICO HENRIQUEZ GRATEREAUX EN CONTRA DE VLADIMIR PUTIN

Tales son los crímenes genocidas del imperialismo yanqui y sus socios en el saqueo y sometimiento de los pueblos y países con su saldo de sangre y destrucción como los casos de Ucrania, Palestina, Siria, Irak, Libia, los países latinoamericanos y la imposición de la invasión de las hordas haitianas sobre la República Dominicana

29-07-2014

 

Tras un mes transcurrido, más o menos, de la infame acusación, del vendedor y comerciante de seguros de la mafia de Báez Romano, Federico Henríquez Gratereaux, sobre Putin; de quien, lo menos que dijo fue que carecía de escrúpulos, en tal grado, que era capaz de robarle las muletas a un inválido; elaborada dicha infame acusación, a la luz y con toda la sustancia de la víbora que es Federico Henríquez Gratereaux, que se materializa en su condición de insidioso, y en la pusilanimidad de encubrirse en frases generales, que pueden significar una cosa como de la misma cosa exactamente lo contrario; siempre para calumniar y distorsionar la verdad de los hechos; pasado casi el mes, los hechos y acontecimientos, tanto de Ucrania, cuyo gobierno fascista era, según Federico Henríquez Gratereaux, el infeliz y desprotegido inválido al que Vladimir Putin, la encarnación del mal, a su entender de mercenario vendido al servicio del imperialismo yanqui y del régimen oligarquía y sus grupos parásitos y buitres, que forman los círculos y estamentos oligárquicos, con la Iglesia Católica-Vaticano a la cabeza; si Federico Henríquez Gratereaux hubiese, alguna vez en su puta vida, demostrado entereza, honradez y honestidad, se le podría demandar que haga un balance y juzgue su propia proeza.

Los hechos de Ucrania, cometidos por los títeres yanquis del gobierno de Kiev, que encabeza Poroshenko, dicen que éste es un carnicero y lacayo nazi-fascista criminal; que su administración pelele yanqui es la recreación y continuación de los grupos ucranianos seguidores de Adolfo Hitler, que efectuaron sucesivas y diversas campañas de eliminación de judíos, así como de polacos, que la historia recoge como idiosincrasia común de los ucranianos, y que, por ello, Poroshenko y sus nazi-fascistas de Kiev se han propuesto llevar a cabo una limpieza étnica de rusos y sus ancestros que, en el Sureste de Ucrania, constituyen más del 90% de la población ucraniana, de ascendencia directamente rusa; y tal es el motivo y finalidad de no dialogar ni buscar salidas políticas a esa crisis, que ha devenido, convirtiéndose, en una cruenta guerra civil.

Fueron Poroshenko y su gobiernucho nazi-fascista de Kiev, los que ordenaron y llevaron a cabo el derribo del avión malasio de pasajeros, asesinando a 298 personas, incluida la tripulación, buscando culpar a Rusia, y a Putin en particular.

Ante el anuncio de que una comisión internacional, de expertos en asuntos aeroespaciales, se preparaba para abordar el avión que la trasladaría a Ucrania, Poroshenko y su gobiernucho redoblaron los bombardeos contra la población de la zona del derribo del avión con un sofisticado misil; lo que, no cabe dudas que es con el objetivo de imposibilitar el esclarecimiento de los hechos e impedir que quede establecido que fue un avión del gobierno de Kiev, de Poroshenko, el que disparó el misil que impactó en la parte trasera del avión de pasajeros malasio.

La cuestión es que las acciones de Poroshenko, y su banda nazi-fascista ucraniana, son auspiciadas por el imperialismo yanqui y su gobierno de Obama. Y es queriendo evitar cargar con sus propias responsabilidades, y fomentar un estado de hostigamiento contra la Rusia de Putin y sus seguidores, buscando el momento de subyugarlos, como sucedió con el gobierno del traidor y borracho Boris Yeltsin.

Resulta una verdad incuestionable, que los Estados Unidos son los creadores del sangriento conflicto de guerra en Irak, como de las acciones terroristas de los mercenarios que ellos, los Estados Unidos, financian y entrenan, junto con los jeques de la ultra-reaccionaria Arabia Saudita.

Otro tanto sigue ocurriendo en Libia, país que se ha convertido en tierra de nadie, encontrándose en una profunda crisis nunca antes vista en dicho país.

Estados Unidos usó a su sirviente de Francia para financiar grupos de mercenarios y aventureros terroristas para invadir a Libia, asesinar a Kadaffi, tras el derrocamiento de su régimen. Y tanto Estados Unidos como Francia, están llamando con carácter de urgencia a que sus ciudadanos abandonen cuanto antes a Libia, ante la inminencia del recrudecimiento y generalización de la guerra civil que allí se desarrolla.

Otro tanto tenemos con el genocidio que llevan a cabo los judíos de Israel contra la región palestina y la población palestina, mediante sus continuos bombardeos a la población civil, a hospitales, escuelas y, por lo tanto, indiscriminadamente. Los palestinos muertos, víctimas de los israelitas, se aproximan a los 1,500, cuyo 70%, o más, son niños y mujeres, como ancianos. Y es harto conocido, que el régimen desalmado de Benjamín Netanyahu de Israel, es un apéndice incondicional del imperialismo norteamericano; y éste es su principal defensor; que ha llegado al extremo de, cínicamente, afirmar, ante la carnicería de palestinos efectuada por los judíos, que los judíos no han hecho más que defenderse de la agresión palestina.

Quisieron desplegar la farsa de que los sistemáticos bombardeos por aire y tierra, como desde el mar, sobre Palestina, era la represalia por tres jóvenes judíos muertos por Hamás; sin embargo, no pueden explicar lo de que, si ese hecho aconteció a una gran distancia geográfica de la Franja de Gaza, ha sido ésta la zona sobre la que las fuerzas militares judías han masacrado a sus habitantes palestinos y ocupado su territorio.

Así, todo indica que la agresión genocida y criminal, de lesa humanidad, de Israel nazi-fascista contra la Palestina, fue un plan orquestado y coordinado bajo la dirección conjunta del gobierno de Obama-Kerry y el de Benjamín Netanyahu.

No hay, hoy día, una región en el mundo en la que el imperialismo yanqui no esté auspiciando la inseguridad, con el terrorismo bajo todas sus formas. En las más remotas regiones, como Afganistán, al igual que en las más cercanas a nuestro país, como son los casos, en conjunto, de Venezuela, Argentina y Cuba.

Otro tanto ocurre con la presencia y actividades de guerra, agresión y saqueo del imperialismo yanqui contra los países tercermundistas. Lo que se refleja, de manera aleccionadora, con la imposición, violatoria y transgresora de nuestra soberanía nacional y la autodeterminación, como de la independencia nacional, de darle la ciudadanía a contingentes de hordas haitianas; a riesgo, digámoslo de una vez por todas, de que, en cualquier momento, estalle una contienda armada para echar del país a los invasores haitianos.

Trastrocando, e invirtiendo la verdad de los acontecimientos y el comportamiento de los países y sus gobiernos, Federico Henríquez Gratereaux, en esta ocasión, como siempre ha hecho, ha sido una cotorra repetidora y propulsora de todas las mentiras, como de las campañas de los centros de propaganda norteamericanos de ocultar su responsabilidad de primer orden en todo lo que significa violencia contra los países y pueblos.

Recientemente China, Rusia, la India, Sudáfrica y Brasil, que forman el grupo económico-político conocido como el BRICS, han llevado a cabo una importante política, cuyo contenido y significado son una embestida directa contra las prácticas de sometimiento, chantajes e imposición, de parte del imperialismo yanqui y sus socios, iguales a él, de la Unión Europea; dejando constituido, junto con los países de Unasur, que incluye a Venezuela, Brasil, Argentina, Colombia, Bolivia, Uruguay, Ecuador, como a otros, un banco de soporte financiero y protección de la voracidad insaciable del imperialismo norteamericano y los imperialistas de la Unión Europea.

El banco internacional éste ha definido que su propósito principal es coadyuvar al buen desenvolvimiento, sin chantajes ni intimidaciones políticas, militares y policiales, por parte de las instituciones buitres, hienas, contra nuestros países y pueblos, como el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial, portadores de la más despiadada política económica neoliberal y de subyugación, como del saqueo de nuestras riquezas, junto a la hipoteca del futuro; y todo porque son instrumentos financieros del imperialismo mundial, cuyo centro de mayor agresividad expoliadora de los pueblos son los Estados Unidos, secundados por los países hienas de la Unión Europea.

Son los hechos, los sucesos y los acontecimientos a escala nacional, como del conjunto mundial, los que permiten desmentir al rufián Federico Henríquez Gratereaux; quien acusa a Putin de ser tan malvado y canalla que es capaz de robarle las muletas a un inválido como, según Federico Henríquez Gratereaux, es Ucrania y Poroshenko.

Y es que, Federico Henríquez Gratereaux, por los Henríquez, es judío sefardita español; y es portador de todos sus fardos de miserias humanas. Por ello, en tanto secunda, como una gallareta, toda la plataforma anti-rusa y anti-Putin, del imperialismo yanqui, del que, como rufián y estafador, que siendo un vulgar y rastrero vendedor de seguros se hace pasar de contrabando como intelectual, actividad en que da pena y hace sentir conmiseración, dada su indigencia teórico-cultural, carente de savia y de sustancia; por lo que sus escritos son ensartas de trivialidades, superficialidades, que dan fe de su grosera vulgaridad, como ejemplo y arquetipo de adocenamiento.

Así, apoya y respalda, mostrando su verdadera naturaleza de animal carroñero, como los buitres y las hienas, los crímenes monstruosos de lesa humanidad y el genocidio de los palestinos, con los asesinatos de niños y mujeres.

Ese holgazán, vago, vividor y estafador, Federico Henríquez Gratereaux, que se pinta de intelectual, siendo un hombre babosa e inmundamente asqueroso y cretino, guevón y culón, debe atreverse a hablar de los crímenes cometidos por su raza, los judíos, sionistas y racistas.

 

Volver a la Página Principal